Vowsmith basa su negocio de anillos de “personalización masiva” en las capacidades avanzadas de la serie ProJet MJP de 3D Systems.
La joyería no fue lo primero en lo que pensó Charles-Olivier Roy cuando decidió crear un negocio de personalización masiva en torno a la impresión 3D.
Sin embargo, se dio cuenta de que si iba a crear lo que él llama un negocio de “personalización masiva”, tenía que ofrecer un producto de primera calidad, uno que se conectara con una esfera más elevada de emociones.
“No sabía nada de joyería, pero enseguida comprendí que sería un mercado perfecto para mí”, dice Roy, diseñador industrial que anteriormente fundó Artisans du Passage, una empresa que fusiona el arte con las tecnologías digitales en 3D.
“La mayoría de las joyas se compran para expresar emociones, lo que conlleva un precio más alto. Y si hay un lugar que está listo para la revolución, es el taller de joyería. La fundición a la cera perdida, una de las tecnologías más antiguas de la metalurgia, no ha cambiado mucho desde el antiguo Egipto”.
El resultado de la filosofía, la experiencia tecnológica y la intensa planificación de Roy es Vowsmith, que se fundó en septiembre de 2014. Vowsmith es un negocio impulsado de forma digital donde las parejas pueden comprar anillos de boda directamente desde un sitio web de comercio electrónico y personalizarlos con las huellas digitales de su ser querido.
La clave para hacer que Vowsmith evolucione es una impresora de la serie ProJet MJP de 3D Systems, una máquina que, según Roy, “proporciona el más alto nivel de detalle, así como el mayor rendimiento disponible en cera de parafina real, que es ideal para la fundición de anillos”.
Ofrecer libertad de elección
El proceso de producción de Vowsmith comienza con un personalizador en línea que les permite a los clientes elegir su anillo según el tamaño, la forma, el tipo de metal, un diamante opcional y el grabado. Se envía al cliente un kit básico para capturar las huellas digitales de la pareja con tinta. El cliente toma una fotografía de las impresiones de la tinta y la sube al sitio web de Vowsmith.
Las huellas se digitalizan e importan junto con el anillo personalizado y sus características de diseño designadas a un programa de modelado 3D. En cuestión de segundos se crea un archivo STL de alta resolución y se envía a la serie ProJet MJP de 3D Systems para su impresión.
“Ofrecemos a nuestros clientes un control total para que puedan imaginar el diseño, elegir el metal y el diamante, y crear un anillo único que se ajuste a su presupuesto”, dice Roy. “Todo el modelado 3D está automatizado, ya que son las elecciones en línea del cliente las que generan el archivo STL de alta resolución para la producción. La impresora también se carga de forma más o menos automática”.
Más allá de la creación de prototipos a la producción
En la última década, la impresión en 3D se ha convertido en un proceso bastante común en la industria de la joyería. Sin embargo, suele utilizarse para crear un prototipo de un modelo maestro que se produce en masa por medios tradicionales. Vowsmith pone la impresión en 3D en el centro de su producción.
“La serie ProJet MJP es la clave de nuestro proceso de fabricación”, afirma Roy. “En primer lugar, se trata de una impresora de cera real”. Esto significa que no hay posibilidad de que se produzcan fallas en la fundición debido a las cenizas o que se agriete el revestimiento debido a la expansión térmica. La cera real se quema por completo a bajas temperaturas y en menos tiempo que los sistemas a base de resina, por lo que ahorramos energía y mejoramos el rendimiento”.
El material VisiJet M3 RealWax utilizado por la serie ProJet MJP produce piezas de alta definición con detalles nítidos y un acabado de la superficie suave. El material de soporte es fácil de quitar en el postprocesamiento y conserva las características delicadas del anillo.
“No tenemos que dedicar ni un segundo a diseñar estructuras de soporte para los anillos impresos en 3D”, dice Roy. “Tampoco perdemos productividad por piezas no impresas debido a áreas que tienen un mal soporte. Además, no perdemos tiempo reparando las superficies de soporte rotas”.
El gran volumen de impresión (298 x 185 x 203 mm en modo de alta definición) y la producción de ultra alta resolución (694 x 750 x 1600 ppp; 16 µ capas) de la impresora 3D complementan a la perfección el modelo de negocio de Vowsmith.
“La impresora ProJet MJP 3500 CPXMax (ahora disponible como ProJet MJP 3600W Max) tiene un volumen de impresión en masa, ofrece impresiones de muy alta resolución en toda la base de impresión y puede imprimir a una velocidad con la que ninguna otra impresora 3D equivalente puede igualar”, dice Roy. “Competimos con la producción en masa, donde cada segundo cuenta, por lo que confiamos en la ProJet para ofrecer modelos extremadamente detallados de forma homogénea con un rendimiento inigualable”.
Ajuste preciso y adaptación del proceso
Actualmente, Vowsmith tarda alrededor de una semana en entregar un pedido normal, pero Roy cree que puede reducir ese tiempo considerablemente.
“Con la tecnología actual, es totalmente posible recibir un pedido de anillos por la mañana, imprimirlo por la tarde, fundirlo al otro día y enviarlo al día siguiente, es decir, 72 horas desde el pedido hasta la entrega. Podría ir más allá: podríamos instalar impresoras en todo el mundo y alimentarlas de nuestro servidor. Así podríamos resolver el problema del envío internacional de un producto de alto valor”.
Roy tiene objetivos similares, ambiciosos, pero razonables, para el volumen de producción. Espera que Vowsmith venda entre 4000 y 5000 anillos durante el próximo año. Sin embargo, la empresa ya es capaz de producir de 35 a 40 anillos por tirada y completar de tres a cuatro lotes todos los días, lo que supondría una capacidad anual de aproximadamente 50 000 anillos.
También hay trabajos hechos a mano que se podrían automatizar.
“Con el tiempo, podríamos imprimir el árbol de fundición por completo, integrar máquinas de acabado en masa e incluso un engastador CNC de piedras y diamantes. Para el futuro, una tecnología prometedora es la impresión directa en metal (DMP): hemos hecho algunos prototipos con la DMP y hemos logrado resultados muy buenos.
Posibilidades infinitas
Roy piensa que sus metodologías basadas en la impresión en 3D podrían transferirse a otros productos personalizados producidos en cantidades bastante grandes.
“Podríamos cargar cualquier modelo 3D con cualquier nivel de personalización posible y ser capaces de gestionar la producción sin errores”, afirma. “Creemos que nuestra infraestructura seguirá aumentando su valor porque no se basa en el inventario físico”. Hemos combinado una interfaz con un soporte de productividad infinita”.
Roy cree que la personalización masiva es un movimiento que evoluciona exactamente en el momento adecuado.
“Los mileniales están cansados de tomar la misma sopa todos los días y quieren tener un producto que refleje su propia personalidad. Es una generación que está dando forma al futuro del mercado minorista”.
Si la libertad de poder adquirir un producto personalizado creado en pocos días no es lo suficientemente emocionante, Roy afirma que la personalización en masa mediante la impresión 3D podría incluso tener un impacto positivo en el medioambiente.
“Es un modelo de negocio en el que no se produce, traslada ni almacena inventario antes del consumo. ¿Podría ser esta una solución valiosa a los significativos efectos que tuvieron las dos primeras revoluciones industriales en nuestro planeta?”.